2 mantras que te servirán para tomar decisiones
No nacemos con esa capacidad desarrollada, pero... hagamos este trabajo a la inversa en favor de las decisiones que tengamos que tomar.
La base científica de repetirte algo para ti o en voz alta, es terminar creyéndotelo, dado que el cerebro no distingue entre realidad o ficción, y por eso, hasta la fecha aquellas creencias que otras personas han depositado sobre nosotras, no las hemos cuestionado. Las hemos terminado creyendo.
No nacemos con esa capacidad desarrollada de cuestionar aquello que nos cuentan o nos aseguran. No dudamos de lo que las personas de nuestro entorno nos dicen, aunque estén equivocadas.
Damos más valía a las voces de fuera que a nuestra propia voz interior, que no es la de nuestra mente, sino mucho más adentro.
Por eso, te animo a que hagamos este trabajo a la inversa en favor de las decisiones que tengamos que tomar. Para que nos sintamos a gusto con ellas y construyamos una nueva realidad mucho más acorde con nosotras.
Estas 2 frases, estos 2 mantras, que me repito, me ayudan y me potencian; me colocan en el centro y me dan esa claridad que a veces perdemos, yo incluida. Mis decisiones son más coherentes y me traen otros muchos beneficios a veces imperceptibles, además de el de la propia decisión:
Aprendo de mí.
Aprendo a escucharme.
AVANZO.
Mi cuerpo es mi templo.
Y todos damos por sentado que un templo es importante, bonito, fuerte, venerado, y que necesita ser mantenido y cuidado. Por respeto, por amor, por responsabilidad, tengo que quiero cuidar mi templo, quiero cuidar mi cuerpo, porque es mi hogar, mi casa, mi base, el pilar de mi salud y los brazos que me permiten abrazar, la piel que me permite sentir, la lengua que me permite saborear, los ojos que me permiten ver amaneceres, a mis hijos, a mis padres, a mí al espejo. los oídos que me permiten escuchar a los demás, aprender y discernir.
Mi cuerpo es una parte de mi, y junto a él yo soy un TODO.
Cómo no cuidar esta “máquina”, pensando en cómo lo alimento, qué posturas cojo, cuanto y como descanso, cómo lo miro al espejo… Hay que mimarlo, y no fijarse en su tamaño o forma para sacar fallos, NO LOS HAY. Somos cuerpos funcionales que nos permiten vivir experiencias, nos permite SENTIR LA VIDA, y vivirla.
Repetir Mi cuerpo es mi templo, te acerca a esa visión holística de ti misma. Igual que cuidas de los demás, has de cuidar de ti misma.
Cuidar mi cuerpo, y por ende, mi todo (debe ser y) es mi primer pensamiento por la mañana cuando me levanto, mi primera intención y mi primera decisión.
Si yo me cuido, todo lo demás también será cuidado. Es como una sutil onda expansiva.
Mi yo del futuro está orgullosa y me lo agradecerá.
Esta frase, este mantra es utilísimo para sacarlo en esos momentos de procrastinación, donde nuestra parte consciente saber lo que le viene bien hacer, pero la otra parte nos frena, nos quiere en el mismo punto vital dentro de 2, 3 o 10 años.
Y es que cuando tomamos una decisión bien alineada con nosotras, coherente y viable ahora, en nuestra situación actual, ¿por qué no somos capaces de mantenerla en el tiempo?
Sin quererlo, o más bien, sin darnos demasiada cuenta o darle toda la importancia que tiene, no paramos de ponernos trabas, excusas y postergando eso que sabemos que queremos hacer, pero que requiere de acción, movimiento, levantarse de la silla y cambiar la inercia… (¡un pequeño primer esfuerzo de nada!)
Nadie quiere estar estudiando 3 horas seguidas, renunciar a salir con las amigas, a cenar un poco más ligero todo el tiempo… solo por el placer de hacerlo, sin embargo, nuestra decisión y nuestra intención no debe estar en lo que nos cuesta o en lo que momentaneamente perdemos o no podemos hacer, nuestra mente y nuestra energía debe estar en que lo hacemos PARA ALGO, PARA ALGO MÁS IMPORTANTE Y MÁS RELEVANTE QUE yo misma en este momento y mis ganas enormes de quedarme tirada en el sofá haciendo scroll toda la tarde, por supuesto. Lo que hacemos (porque así lo hemos decidido) es algo que nuestra yo del futuro ya está disfrutando, SI y solo SI yo, la del hoy, toma esa decisión cada día que le lleva a ese futuro que tanto ansía.
El futuro no está tan lejos, no tienen por qué ser 10 años. El futuro es ya mañana, y en gran parte (ojo, que no toda - no asumas más peso del que te corresponde, con tus decisiones ya tienes más que suficiente-), depende de tu yo de hoy, por eso, haz tu parte HOY.
Si repites Mi yo del futuro está orgullosa y me lo agradecerá, estás invitándote de forma amable y proactiva a mover el culo, estás recordándote lo que de verdad quieres, estás conectando con esas sensaciones y emociones de tu yo del futuro que ya lo ha logrado, gracias a que te pusiste en marcha, estás dando un paso más a tu favor.
Todo eso que te dificulta dar el paso (excusas) lo vas a seguir teniendo, en media hora, o esta noche. Ni el chocolate, ni el sofá ni netflix se te van de casa, tranquila.
¿Y qué satisfacción darte alguno de estos como premio verdad?
Y esto es todo por hoy, como pregunto siempre al final de mis sesiones de coaching.
De todo esto… ¿Con qué te quedas? ¿Qué te llevas?
Un abrazo y feliz día.
Laura Sierra
Más de 2.000 mujeres han empezado a abrir la mente, eliminar lo que sobra y tomar mejores decisiones, ¿Quieres empezar tu también el cambio? Regálate mi libro :) Pídelo hoy y mañana te llega a casa.
¿Te ha gustado esta newsletter? 🙋 Si es así, y te gustaría apoyarme y ayudarme a crecer, puedes hacerlo de dos maneras:
Haz una captura de pantalla de tu parte favorita y compártela en stories mencionándome (@positivelittlesoul).
Reenvía este mail a cuantas amigas quieras, se generosa 😉😉 y comparte con ellas tus reflexiones 💕
Hazte con la suscripción de pago de contenido exclusivo.