Hoy quiero hacer una reflexión contigo y darte un consejo que no me has pedido y que quizá no te haga falta, o quizá sí.
Si me sigues por Instagram sabes que están siendo días, semanas y meses complicados (en noviembre hará 3 años de esta montaña infinita que andamos escalando Manuel y yo).
El otro día leía un artículo donde hablaban de no descuidar la pareja bajo ninguna circunstancia, sobre todo durante estos primeros años tan complicados, donde te centras en la crianza, donde todo es nuevo, donde tu y tus prioridades cambian para siempre, donde emprendes un camino desconocido muchas veces en solitario, de la mano de tu pareja pero cada uno de una manera, y al final, cuando terminan estos duros años, te das cuenta que estabais tan centrados en salir adelante, en los hijos y en sobrevivir que os olvidasteis de la base de todo eso, tu misma y la pareja.
Yo pienso muchísimo en eso, porque como sabes, fue convertirme en madre múltiple y necesitar hacer algo más para mantenerme “cuerda”, la vida me llevó a emprender.
Me da mucho miedo que mi evolución y la de mi pareja no sean iguales (no tienen porqué serlo), que cuando todo este jaleo acabe, hayamos dejado de conocernos por no habernos dedicado tiempo.
¿Y por qué cuento todo esto? No es por la maternidad, es algo incluso más importante, LA VIDA, tu vida, TU MISMA. Seas madre o no, lo que te voy a contar a continuación te interesa.
La vida y el EQUILIBRIO, deberían ir de la mano, no centrarnos nunca en una cosa, en una faceta, en una persona, porque cuando nos centramos en algo o en alguien, descuidamos todo demás.
En la maternidad suele verse claro esto que te cuento, pero ocurre en muchas más circunstancias de la vida. Mucho/demasiado tiempo, fuerza, energía, esfuerzo y foco en:
Tu trabajo actual.
En tu emprendimiento.
En tu vida social.
En alguien (enfermo o con necesidades especiales) que lo necesita.
Tu hogar.
El servicio a los demás.
Tu pareja.TU.
Sentada y escribiendo, me puse a pensar en que he estado meses centrada en mis proyectos y en mis hijos. No me siento mal ni culpable, pero mi pareja pasó a tercer plano. Y eso tampoco es lo que quiero. La excusa en el caso de los proyectos de que era temporal, no sé hasta que punto era realista.
Como siempre suelo decir, ser consciente es el primer paso, y actuar es el siguiente.
Ya tengo creada la visión de la vida que quiero y ya la empecé a construir, sé que personas quiero que estén a mi lado, y lo feliz que quiero que seamos cada uno de nosotros. Pero las cosas no pasan porque sí, ni una relación cambia de la noche a la mañana, por eso, rescato lo que para mí es el equilibro y me pongo manos a la obra.
El diario de hábitos ha sido el punto de partida. El autocuidado es pensar más en mí como persona (mujer) y en qué me hace sentir bien, qué quiero y qué necesito en cada momento.
Cuidar cada faceta de tu vida no es solo un hábito, sino una necesidad vital.
Cuidar de mi pareja en este caso, como ella lo hace de mí, me da ese equilibrio que me falta.
Mis hijos están bien.
Mis proyectos siguen adelante.
He retomado el ejercicio y la lectura.
Escribo cada día.
Ahora solo falta, pensar y cuidar más en quien me cuida y piensa en mí.
Hoy estoy hablando de mi pareja, pero quien dice pareja, dice padre, madre, hermana o amiga. Todos pueden ser igual de importantes y necesarios.
¿A quién estás descuidando tu? ¿A quién no le estás dedicando tiempo y es importante para ti?
Para terminar, quiero recordarte que no eres solo una cosa, eres la suma de muchas. Tu vida no la completa una sola faceta, ni una sola persona. Hay que dedicar tiempo a todo lo que para ti es importante. No descuidar nada que des por hecho.
Como la salud, no solo hay que pensar en ella cuando te falta.
Gracias por leerme, comentarme, compartirme y recomendarme un domingo más.
De verdad que no me lo has escrito a mí??? Es broma, pero sí que me siento muy identificada, la vida va muy deprisa y el tiempo nos pasa por encima, estás en el buen camino y lo sabes... Pero date tiempo, tus peques son eso, muy peques, os necesitan mucho todavía, así que no queda otra... Ánimo y seguir juntos en la pelea del día a día, los momentos de reencuentro llegarán y os sabrán a gloria!!! 💪🏼💪🏼💪🏼😍😍
Gracias Laura por tu reflexión. Es normal que en determinados momentos algo nos absorba. Cuando nos damos cuenta de ello podemos mirarlo, comprender el contexto y, en la medida de lo posible, no juzgarnos por habernos dejado arrastrar. Y luego actuar para volver al equilibrio. Gracias.